Primero que nada, tranquila. Después de un atracón o de tener alguna comida que no estaba planeada es normal que te sientas mal al respecto. En este momento tienes de dos; o recurrir a Mia, o quemar las calorías después con ejercicio.
Sé lo desesperante que es estarte matando todo el día para que al final (generalmente entre las 5 y las 8), terminémonos comiendo una suma de calorías impresionantes en unos minutos. Pero tranquila, para todo hay solución, Roma no se hizo en un día,
Todo el mundo puede tener equivocaciones, y que tú las tengas no significa que eres menos o algo por el estilo, significa que necesitas luchar un poco más fuerte para tener éxito, que la única manera de lograrlo es intentándolo muchas veces.
Si eres nueva en esto, o si ya llevas tiempo y de todos modos te cuesta ayunar, tengo la solución: Todo se trata de crear hábitos, de acostumbrar al cuerpo a algo, si estás acostumbrada a comer más de 1200 calorías al día es obvio que un ayuno o un semi-ayuno te van a costar mucho trabajo completarlos. Por eso, empieza poco a poco, una semana 1,200, la otra 1,100, la que sigue 1,000 y así hasta que estés contenta. Con eso ya puedes empezar una dieta como la Skinny Girl, que es bastante sencilla ya que no cuentas los vegetales ni las frutas, o hasta la ABC, que es más difícil.
En lo personal, Nat y yo estamos haciendo la dieta de las princesas Disney, que encontramos en un blog. Es bastante ingeniosa y divertida.
Recuerden que somos princesas pero también somos guerreras ¡Fuerza, chicas!
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